En un rincón del mundo donde el deporte se erige como un poderoso motor de inclusión, la historia de Joanna Burkat destaca como un testimonio vibrante de la capacidad del fútbol para unir a las personas y superar barreras culturales.
Originaria de Myślenice, Polonia, Joanna adoptó a México como su segunda patria, incluso antes de establecerse en el país en el 2021. Su conexión con la cultura mexicana surgió gracias a la influencia de su madre, quien le transmitió su profunda admiración por México, el Club América y sus inolvidables visitas al país. Desde pequeña, Joanna se vio envuelta en un ambiente mexicano, en parte transmitido por las anécdotas y recuerdos de su madre sobre México, quien también la familiarizó con la comida picante y, al mismo tiempo, con prendas inusuales para la cultura polaca como las botas y algunos vestidos regionales.
La chispa que encendió su pasión por el fútbol mexicano fue avivada también por los amigos de su madre quienes de igual modo eran grandes aficionados al club. Así nació su sueño de algún día vivir en México y ser parte del club de sus amores: el América.
Años antes de llegar a México y desde Polonia, comenzó a crear su primer sitio web con noticias del Club América, un paso que la impulsaría a dominar el idioma español. Hoy, su trabajo está enfocado a su labor como influencer y a los sitios web que echó a andar años atrás, al frente de un equipo dedicado a mantener las páginas actualizadas con información y noticias del día.
Tras asentarse en Brasil en 2019, su sueño de vivir en México se materializó al mismo tiempo que creció su pasión por el equipo, y en una búsqueda por unir su afición por el fútbol y su interés por compartir contenido en redes sociales, se unió a una comunidad conformada por un gran número de aficionados, estimada en 36 millones en México. Dicha comunidad, resalta, la ha hecho valorar el tema de la inclusión, ya que tanto ella como su esposo, originario de Brasil, han vivido anécdotas donde han sido excluidos por ser extranjeros.
“En Polonia, una persona le gritó a mi esposo, ´Polonia para polacos´. Me dolió mucho que en mi país trataran tan mal a mi esposo, porque para mí el mundo es para todos. Después de esta situación, decidimos mudarnos de Polonia para siempre. Ahora con la guerra de Ucrania, debe ser también difícil para los extranjeros que no se sienten bienvenidos en Polonia. Estoy muy agradecida con México por recibirnos tan bien, aquí puedo sentirme como en casa”.
Con su historia, Joanna refleja la capacidad del deporte para trascender fronteras y crear lazos profundos. Desde su llegada a México, se ha convertido en una figura como influencer y gestora de páginas web del Club América, acumulando más de 1 millón de seguidores en todas sus redes sociales. Entre sus logros más grandes como influencer americanista, reconoce, fue conocer al “maestro” Carlos Reinoso, jugador histórico y referente del club.
"México me ha recibido con los brazos abiertos y el Club de mi corazón igual. Estoy muy agradecida por poder tener este amor correspondido y poder llevar a muchos mi pasión por el América y por el fútbol", comparte Joanna, cuya voz resuena en las plataformas digitales (Facebook, Instagram y TikTok).
Su afición por el equipo también se traduce en una extensa colección de jerseys y en su propia visión a futuro, donde se visualiza viviendo en una casa frente a la playa y decorada con el espíritu azulcrema. Su historia destaca la capacidad del deporte para no solo integrar a las personas en una comunidad, sino también para inspirar sueños y metas individuales que trascienden las fronteras nacionales.
"Es un honor para mí poder ser este puente entre el club y la comunidad", expresa Joanna sobre su papel como una influyente figura del Club América, el cual asegura se ha convertido en un eje de inclusión, donde hombres, mujeres, extranjeros y nacionales se unen bajo una misma pasión.
A la par de compartir su entrega por el fútbol, Joanna abraza con entusiasmo la rica cultura mexicana que ha descubierto a través de este deporte y aunque sabe que a donde vaya siempre habrá gente que ataque en redes sociales, ella asegura que en México son la minoría.
"Cuando las personas se identifican con un equipo de fútbol, se crea un sentimiento de comunidad y pertenencia que trasciende las barreras sociales y culturales. El fútbol se convierte en un lenguaje universal que une a las personas y les permite compartir emociones y experiencias en común".
Con su historia, Joanna Burkat se erige como un faro de esperanza y unidad en el mundo del deporte, demostrando que el fútbol va más allá de ser simplemente un juego; es un vínculo que puede tejer historias de inclusión y superación, uniendo corazones en una red global de pasión compartida.
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